Pros y contras de las pilas recargables

Si introducimos “comprar pilas recargables” en Google, obtenemos alrededor de 4,5 millones de resultados. Hablamos de tiendas que seguramente te resulten familiares, como Amazon, Fnac, Carrefour, Alcampo, Media Markt…

Esto quiere decir dos cosas: que se venden mucho y que son rentables. Pero... ¿lo son para ti? Analizamos sus ventajas y desventajas.

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Historia de las las pilas recargables

Desde la invención de la pila eléctrica por Alessandro Volta en 1800, el ámbito de las baterías portátiles ha tenido un enorme desarrollo. 

Las pilas recargables o reutilizables comenzaron a generalizarse en 1991. Los que las tuvieseis en aquella época recordaréis que era muy importante controlar los procesos de carga, pues si se sobrecalentaban, podían explotar.

Posteriormente, en 1996, se empezó a comercializar la batería de iones de litio o Li-Ion. Su ligereza y tamaño permite adaptarse a la forma de cada dispositivo, además gozan de una larga vida útil y un rendimiento muy superior.

Las baterías de litio son las que comúnmente usamos en nuestros smartphones, portátiles o tablets.

Reconstrucción de la primera pila eléctrica de Alessandro Volta (1800)

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Tipos de pilas recargables

Actualmente, podemos clasificar los tipos de pilas recargables domésticas en tres categorías:

• Pilas NiCd: compuestas por níquel-cadmio, son las más económicas y también las más antiguas. Fueron inventadas por Waldemar Jungner de Suecia en 1899, sobre los modelos de Thomas Edison. Han sido completamente sustituidas por las de níquel-hidruro metálico, que las superan en capacidad de carga y vida útil. Además, el cadmio es altamente tóxico.
  
  
• Pilas NiMH: recargables y exentas de cadmio, fueron desarrolladas en los 80. Comienzan a comercializarse en 1991.
  
  
• Pilas de iones de litio: son las más utilizadas en los dispositivos electrónicos por su tamaño y pérdida de carga lenta. Aún siguen en desarrollo. Como veíamos antes, son las que incorporan nuestros dispositivos móviles.
  
  
• Pilas alcalinas: las de un solo uso.
  
  

Pros y contras de las pilas recargables

Las pilas recargables tienen una serie de ventajas e inconvenientes con respecto a las alcalinas, las de usar y tirar (reciclar). Tú eliges cuál es la solución que mejor se adapta a ti.

✔️ Ventajas de las pilas descargables

1. Son más ecológicas. Esto quiere decir que contienen menos residuos contaminantes, pero también que al poder reutilizarlas, contribuyes a generar menos desperdicios.

2. Independientemente de eso, todas las pilas deben ser desechadas en puntos de reciclaje específicos y nunca estar en contacto con las nuevas, pues podrían dañarlas.

Las pilas contienen muchos elementos contaminantes, pero con su reciclaje es posible reutilizar hasta el 75% de sus materiales.

Así que recuerda, ¡recicla siempre!

3. Hay pilas recargables de diferentes tamaños y potencias. Las más habituales son:

• Pilas AA y AAA. Ambas con un voltaje de 1, 5 V, pero las primeras de tamaño inferior (típicas para el mando de la televisión, por ejemplo)
• Pilas C: muy usadas para juguetes electrónicos, por ejemplo. También de 1,5 V.
• Pilas D: son las de tamaño más grande.
• Pilas PP3: son rectangulares y de mayor voltaje (9 V). Además tienen ambos polos en el mismo lado.

4. Pueden usarse en múltiples ocasiones. Cada marca y modelo ofrece una cantidad de ciclos de carga y de vida, entendida como el tiempo que puede permanecer cargada si no está en funcionamiento.

5. Encontramos cargadores y pilas recargables a precios módico. En una búsqueda rápida encontramos un cargador USB de 4 pilas por menos de 8€. También un paquete de 8 pilas recargables Amazon Basics por 10,99€.

❌ Desventajas de las pilas descargables

1. Son más caras que las pilas alcalinas.

2. Se descargan más rápido cuando están inactivas.

3. Se recomienda esperar a que la pila se descargue del todo para volverla a cargar.

4. Aún así, las pilas recargables van perdiendo capacidad hasta que mueren definitivamente (son recargables, no infinitas).

Nuestra recomendación:

Resulta más rentable y operativo usar pilas alcalinas en aparatos de uso constante, por ejemplo, el mando de la tv o un juguete que se usa mucho.

Las pilas recargables son idóneas para dispositivos que usamos de manera puntual y no están siempre en stand by, por ejemplo, una cámara de fotos.

Eso sí, antes de usar el dispositivo, comprueba la carga de las pilas, y cuando dejes de usarlo, pon las pilas a cargar.

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Consejos de uso sobre las pilas

• Comprueba que el cargador y las pilas son compatibles. Como comentamos al principio, es muy fácil encontrarlos.
  
  
• Los cargadores más modernos incorporan una pantalla que indica el porcentaje de carga. Como mínimo, tendrá una luz LED para señalar la carga completa.
  
  
• Infórmate sobre el número de ciclos (número de veces que la pila puede ser recargada) y su vida en almacenamiento. También el tiempo de carga del cargador porque hay diferencias.
  
  
• Nunca juntes pilas usadas y nuevas, pues podrían deteriorarse.
  
  
• Nunca mojes una pila. Si ya no hay remedio o si notas que tiene un polvo blanquecino en su superficie, deséchala cuanto antes. Lava con agua y jabón de inmediato todo lo que haya estado en contacto con las pilas (piel, ropa, etc.).
  
  
• Retira las pilas de los aparatos que no vayas a usar durante un tiempo. Lo correcto es almacenarlas en un sitio seco a temperatura ambiente. Procura que sus polos no estén en contacto.
  
  
• En sitios con temperaturas extremas, las pilas alcalinas funcionan mejor.
  
  
• No guardes pilas en los bolsillos o en el coche. En contacto con objetos metálicos podrían cortocircuitarse y producir lesiones.