10 consejos para ahorrar en gasolina

Con el incremento del precio de la gasolina, son muchos los conductores que esperan a entrar en reserva para repostar. Si crees que tu coche está gastando más combustible del que debería, aquí (con la ayuda del RACE) te ofrecemos unos consejos para ahorrar gasolina y mantener el depósito lleno durante más tiempo.

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1. Comprueba la presión de los neumáticos

Es muy importante tener en cuenta la presión de los neumáticos en función de dos factores: las indicaciones del fabricante y las condiciones climatológicas, no solo para una conducción eficiente que garantice un ahorro de la gasolina, también para aumentar la seguridad.

En relación al consumo, si las ruedas no están hinchadas adecuadamente o el filtro de aire está en mal estado, podría llegar a duplicar el consumo del carburante del vehículo. Ejercer un mantenimiento frecuentemente podría aumentar el rendimiento del combustible hasta un 4% en un vehículo estándar.

Recuerda, si conduces con una presión en los neumáticos de 0,5 bares inferior a la recomendada el consumo se incrementa hasta en un 2% en vías urbanas y un 4% en las vías interurbanas. Además, debes tener en cuenta que en épocas frías los neumáticos precisan de un poco más de presión.

2. Arranca y frena adecuadamente

Si tu coche es gasolina, una vez hayas arrancado, podrás iniciar el viaje. Sin embargo, una recomendación que hacemos para los vehículos diésel es que esperes unos segundos antes de iniciar el trayecto. Así ahorrarás combustible.

Sabemos que conduces de fábula, pero he aquí unos consejos para una conducción eficiente. En cuanto a las marchas, utiliza la primera solo durante los primeros segundos, después aumenta a segunda velocidad y conduce a unos 20 km/h durante los próximos 5 segundos. De esta forma, según el RACE podrás ahorrar hasta un 11% de carburante. Ah, y evita acelerar bruscamente. ¡Suavidad ante todo!

En cuanto a las frenadas, antes de pisar el pedal del freno, suelta el acelerador suavemente. Este sencillo truco detiene el suministro de combustible, aumentando el rendimiento del mismo en más de un 2%.

3. Evita las cargas excesivas

En la medida de lo posible, intenta no cargar demasiados objetos a bordo, ya que, según RACE, conducir con más de 100 kilogramos aumenta el consumo de combustible en un 6%. No parece un porcentaje muy elevado, pero en largas distancias se nota.

4. Sigue una velocidad estándar

Una velocidad lineal ayudará a evitar un consumo de carburante excesivo, puesto que, circulando a más de 20 kilómetros por hora con una marcha uniforme, el consumo de combustible es mínimo.

Como bien sabrás, a partir de los 90/100 km/h el consumo se dispara progresivamente. Otros consejos que debes tener en cuenta es, si es posible, evitar los frenados bruscos y los cambios de marcha que no sean necesarios.

5. No enciendas el aire acondicionado

Sí, somos conscientes de que en verano, seguir esta regla es prácticamente imposible, pero en épocas en las que las temperaturas en el exterior del vehículo se mantengan en torno a los 20 ºC, no pongas el aire, baja las ventanillas. Recuerda que el consumo de gasolina es un 12% mayor con aire acondicionado.

6. Aprovecha los descensos

Jugar con las inercias puede ayudarte a reducir el consumo. No hagas cambios de marcha muy bruscos y en los descensos, prueba a cambiar de marcha circulando a bajas revoluciones.

7. Apaga el motor cuando sea necesario

Si vas a hacer una parada larga, lo mejor es que apagues el motor completamente. ¿El motivo? Los motores a ralentí (el régimen mínimo al que puede funcionar el motor del coche) consumen carburante aunque el vehículo esté parado.

8. Plantea un mantenimiento periódico del vehículo

Este consejo no solo es necesario para ahorrar carburante, al igual que en el caso de la presión del neumático, garantiza la seguridad de los ocupantes durante los viajes por carretera.

Recuerda, la primera revisión debe realizarse en torno a los 5.000 kilómetros, la segunda a los 10.000 kilómetros y a partir de la tercera, más o menos, repetirlas cada 15.000 o 20.000 kilómetros. Todo esto viene determinado en el libro oficial del vehículo o, en los coches modernos, lo recuerda automáticamente.

9. Llena el depósito

Según se estima, lo mejor es mantener el depósito de combustible lleno siempre. A medida que se va agotando la gasolina, rellenar de poco en poco. En definitiva, no esperes a que el coche entre en reserva, puesto que cuanto más vacío esté el depósito, más rápido se evapora el combustible, y por tanto, se acaba mucho antes.

10. Mantener las ventanillas cerradas

Cuando vamos a grandes velocidades, por ejemplo, en carreteras o autopistas, llevar las ventanillas abiertas puede incrementar el consumo de carburante. ¿El motivo? El aire entra en el interior del vehículo, y éste precisa más esfuerzo para moverse, es decir, más combustible.

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