10 trucos para limpiar el frigorífico de manera eficiente

El frigorífico es uno de los electrodomésticos más usados de la cocina, y también uno de los que más tiende a acumular suciedad, olores y restos de comida. Mantenerlo limpio no solo es esencial para la higiene de los alimentos, sino también para su buen funcionamiento. A continuación, te damos algunos trucos para limpiar el frigorífico de manera eficiente y prolongar su vida útil.

1. Desenchufa el frigorífico antes de empezar

Para garantizar la seguridad durante la limpieza y evitar que el aparato sufra un cortocircuito, el primer paso es desenchufar el frigorífico. Esto evitará accidentes eléctricos y permitirá que puedas dejar las puertas abiertas sin malgastar energía. 

Además, en muchos casos los frigoríficos tienden a acumular hielo en las paredes. Apagando el dispositivo, garantizamos que el proceso de descongelación sea más rápido.

Antes de llevar a cabo esto, vacía completamente el frigorífico, incluyendo los compartimentos de la puerta. Este es el momento ideal para revisar fechas de caducidad y deshacerte de alimentos en mal estado o aquellos que ya no vas a consumir. 

Te preguntarás, ¿qué hago con los alimentos perecederos? Colócalos en otro frigorífico mientras efectúas la limpieza. Si no dispones de uno extra, puedes optar por una nevera portátil, una bolsa para congelados o dejarlos en un lugar fresco mientras realizas la limpieza, si no vas a tardar mucho.

2. Desmonta y limpia las bandejas y cajones

Para una limpieza del frigorífico eficiente y efectiva, tendrás que desinfectar todas las áreas. Para ello, te recomendamos sacar todas las bandejas, estantes y cajones del frigorífico. Estos elementos suelen estar hechos de vidrio, plástico o metal, por lo que pueden limpiarse fácilmente con agua tibia y jabón. 

Si hay manchas persistentes, puedes remojarlos durante unos minutos en agua tibia y una solución de limpieza y frotar con una esponja no abrasiva. Asegúrate de secarlos completamente antes de volver a colocarlos para evitar la formación de moho.

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3. Limpia el interior con una solución natural

Una de las dudas más generalizadas a la hora de limpiar el frigorífico es: ¿qué utilizo para limpiarlo? Los productos químicos como la lejía o el amoníaco, aunque desinfectantes, no son los mejores en este aspecto, ya que es una zona en constante contacto con alimentos. Podría producirse una contaminación cruzada. 

Nosotros te recomendamos una mezcla de agua tibia y vinagre blanco de limpieza; es perfecta para limpiar el interior del frigorífico, ya que el vinagre es un desinfectante natural y ayuda a eliminar los malos olores. 

Puedes usar una esponja o un paño suave para limpiar todas las superficies, incluidas las paredes, los compartimentos y las juntas de las puertas. Evita el uso de productos de limpieza abrasivos, ya que pueden dañar las superficies del frigorífico. No te olvides de aclarar sea cual sea el producto que uses.

4. Presta atención a las zonas difíciles

Las esquinas, las juntas de las puertas y los compartimentos de los huecos suelen ser las zonas más difíciles de limpiar y además, donde aunque no lo creas, se acumulan múltiples bacterias. 

Para acceder a estas áreas y eliminar cualquier residuo o acumulación de suciedad, utiliza un cepillo de dientes viejo o un bastoncillo de algodón y la misma solución de agua tibia y vinagre de limpieza. Recuerda secarlo con una bayeta seca o un poco de papel de cocina. 

5. Elimina los malos olores

Si tu frigorífico tiene malos olores, puedes colocar un recipiente con bicarbonato de sodio en su interior una vez que esté limpio. El bicarbonato es excelente para absorber los olores desagradables. 

Otras alternativas un poco más naturales pero muy extendidas son usar carbón activo, café molido o la mitad de un limón con clavo de olor. Ambientadores naturales muy utilizados para neutralizar los olores de cualquier lugar.

6. Limpia el congelador

Si tu frigorífico tiene congelador, aprovecha para limpiarlo también. Si tiene acumulación de hielo, deja la puerta abierta para que se derrita. Después, sigue los mismos pasos que te mencionamos con anterioridad, asegurándote de secar bien antes de volver a enchufar el aparato.

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7. Limpia la parte exterior y trasera

No te olvides de limpiar el exterior del frigorífico, especialmente la parte trasera, donde se encuentra el compresor y las bobinas. Estas zonas suelen acumular polvo, lo que puede afectar el rendimiento del frigorífico. 

Se trata de un área muy delicada. Para evitar cualquier daño, usa un paño seco para quitar el polvo o un cepillo pequeño para llegar a las áreas más difíciles. Mantener las bobinas limpias ayuda a que el frigorífico funcione de manera más eficiente y consuma menos energía.

En la parte delantera puedes utilizar una bayeta de microfibra o trapo húmedo con líquido limpiacristales. De esta forma evitaremos cualquier tipo de marca en el frontal de nuestro frigorífico. ¡Te verás reflejado! 

8. Coloca los alimentos de forma ordenada

Una vez que el frigorífico esté limpio y seco, es el momento de volver a colocar los alimentos. Organiza los productos de forma que los alimentos más viejos o aquellos que caducan primero estén al frente, para que los uses antes. 

Además, te recomendamos mantener los productos en contenedores herméticos tipo tuppers para evitar derrames y malos olores, sobre todo si tiendes a preparar comida de más. 

9. Adquiere organizadores de alimentos 

Los organizadores de alimentos son la alternativa perfecta para sacar el máximo provecho a tu frigorífico. Si siempre piensas que no tienes espacio es porque no estás colocando los productos de forma correcta.

Este punto está estrechamente relacionado con el anterior. Puedes adquirir este tipo de organizadores en cualquier tienda de cocina o también en IKEA, Amazon o AliExpress. Se trata de pequeñas piezas de plástico apilables que te permitirán separar todos tus alimentos y hacer torres. 

10. Repite la limpieza con frecuencia

Es recomendable realizar una limpieza profunda del frigorífico al menos una vez cada tres meses. Sin embargo, una limpieza rápida semanal te ayudará a mantenerlo en buen estado, evitar la acumulación de suciedad y detectar alimentos en mal estado a tiempo. Con constancia, siempre tendrás el frigorífico a punto y te evitará arduos trabajos de desinfección. 

Recuerda que la limpieza del frigorífico no solo te permitirá mantener tu cocina más higiénica, sino que también optimizará el rendimiento del electrodoméstico y prolongará su vida útil. Con estos sencillos trucos, tendrás un frigorífico limpio, ordenado y libre de malos olores, lo que hará que tus alimentos se conserven mejor y por más tiempo. ¡Tu cocina te lo agradecerá!

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